De chaquetas de dotación, a bolsas de dormir
Bogotá 08 de febrero de 2023 Creado por fin/VCRG/dmh/LOF N.° 996
Después de un año de uso, las chaquetas de poliéster que la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) entrega a sus 3.000 trabajadores para visitas domiciliarias y actividades al aire libre, se podrían convertir en una bolsa de dormir, o sleeping bag. Su reutilización contrarrestaría el impacto ambiental que producen los materiales que no se descomponen de manera natural.
Las bolsas de dormir tienen un potencial en el campo del ecoturismo. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL. DESCRIPTION
El saco de dormir es cómodo y ligero y permite graduar el cubrimiento corporal, útil para el ecoturismo. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL. DESCRIPTION
Elaborar bolsas de dormir y rediseñar la chaqueta fueron algunas propuestas realizadas por el Grupo Abotonados de la UNAL. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL. DESCRIPTION
La bolsa de dormir sirve para niños y adultos. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL. DESCRIPTION
Las bolsas de dormir tienen un potencial en el campo del ecoturismo. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL.
El saco de dormir es cómodo y ligero y permite graduar el cubrimiento corporal, útil para el ecoturismo. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL.
Elaborar bolsas de dormir y rediseñar la chaqueta fueron algunas propuestas realizadas por el Grupo Abotonados de la UNAL. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL.
La bolsa de dormir sirve para niños y adultos. Foto: Grupo Abotonados – Diseño Industrial UNAL.
Pese a ser ampliamente usado en la industria textil, el poliéster –empleado comúnmente en la elaboración de elementos de protección personal (EPP)– es una fibra sintética o plástica no biodegradable que contamina océanos y suelos. Es una tela con poca ventilación y en algunos casos puede producir alergias por los químicos utilizados en el proceso de su fabricación.
En 2021, un estudio publicado por el diario británico The Guardian advirtió que las microfibras plásticas son una sustancia abundante en el ecosistema de la Tierra, constituyendo el 90 % de la contaminación microplástica en el océano Atlántico, y son fácilmente ingeridas por los peces y el plancton que sostienen el ecosistema marino.
La propuesta de fabricar bolsas de dormir a partir de estas prendas surgió en el Grupo Abotonados, conformado por estudiantes de sexto semestre de Diseño Industrial de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Bogotá, y forma parte del proyecto “Hacia elementos de dotación y protección personal circulares”, que se realiza en la cátedra Práctica Proyectual VI.
La estudiante Ana Karina Grimaldo, integrante del grupo, explica que “la propuesta es que cuando la chaqueta termine su ciclo de vida de un año, se remanufacture y se fabriquen elementos de camping como una bolsa de dormir ‘estilo sarcófago’, con varias capas que el usuario puede graduar según el ambiente donde se encuentre”.
“Con la reconfección se aprovecharía el 60 % de las piezas de la chaqueta, que está elaborada en polyester, guata (relleno) y botones de nylon, lo cual trae un beneficio para el medioambiente y para la industria textil”, agrega.
La EAAB tiene alrededor de 3.000 empleados, y por norma debe dar 3 dotaciones al año (9.000 dotaciones), que después de su uso se incineran porque se asumen como residuos peligrosos, en muchos casos sin serlo, como en este, pues los trabajadores que utilizan la chaqueta solo trabajan en máquinas.
“A partir del reciclaje de la tela y de la propuesta de rediseñar la chaqueta, la cantidad de dióxido de carbono (CO2) se reduce en un 30 %, al pasar de 22 a 16 kg, lo cual hace que se dé una mejor gestión de los recursos aumentando la vida útil de uno a tres años”, menciona la estudiante Grimaldo.
El profesor Paulo Romero, de la Facultad de Artes de la UNAL, coordinador de la cátedra y director del Grupo de Investigación en Ecoinnovación, señala que “a partir de un proyecto de ecodiseño como este se pueden reutilizar y transformar artículos, a través de la integración de las experiencias, el conocimiento y las ideas”.
En el proceso de ideación de alternativas de uso de los EPP, el Grupo Abotonados propone tres cuadrados, de 6, 8 y 12 cm, para obtener diferentes patronajes y así aprovechar al máximo la tela de las chaquetas.
La bolsa de dormir se compone de tres capas: superficial, interior e intermedia, las dos primeras de poliéster y la tercera de guata, para conservar la temperatura del usuario.
Además tiene una abertura por donde la persona entra fácilmente; dos extensiones o aletas a cada lado que facilitan una graduación de abrigo; cremallera interna y dos botones para cerrar las extensiones del abrigo. Es graduable y la pueden utilizar personas de entre 1,44 y 1,80 m de estatura.
De otra parte, el grupo propuso “rediseñar la chaqueta con tres bolsillos (dos delanteros y uno interior), respondiendo a la necesidad y las funciones del operario, lo que reduce material y componentes que no son indispensables para su confección”, explica la estudiante.
El profesor Romero afirma que “si se cambian los logos de serigrafía por parches termoadhesivos compatibles con el poliéster, o bordados a mano, se podrá aprovechar la prenda mucho más”.
“Es posible innovar y es una habilidad que cada emprendedor debería desarrollar. Así, se deben crear las condiciones adecuadas desde el aula para que los estudiantes puedan desarrollar su creatividad y plantear soluciones sostenibles y sostenidas”
Existe una oportunidad en el mercado de elementos de camping, dado el manejo de los espacios de esta actividad y la carencia usual de un servicio de préstamo en estos negocios.
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